El paisaje del parque Lezama

Actividades

Cómo trabajar con los chicos con conceptos ligados al espacio y a las maneras en que lo representamos.

Conversar sobre el paisaje

1. Para los alumnos de este nivel, te sugerimos contextualizar esta serie de actividades con una reflexión sobre el paisaje. Para introducir el tema, te proponemos impulsar un intercambio oral a partir de una pregunta disparadora amplia, por ejemplo: “¿Qué es para ustedes un paisaje?”. Como generalmente los niños de esta edad reconocen como paisaje solo aquellos muy poco modificados por la acción humana, podés cuestionar esta visión a partir de preguntas de este tipo.

  • Un parque ¿forma parte de un paisaje? ¿Por qué?
  • Si observamos solamente un elemento, por ejemplo un árbol del parque, ¿podemos decir que estamos observando el paisaje?

A partir de las respuestas dadas por los chicos, se los puede ir guiando hacia una definición de paisaje más amplia, que descarte la observación de objetos aislados.

2. En este punto, ya es posible introducir la reflexión sobre los cambios en el paisaje. Te sugerimos comenzar por aquellos que se producen a través del tiempo. En este sentido este recorrido constituye una excelente oportunidad para iniciarla. Invitá a tus alumos a observar y comparar  pares de fotografías que aparecen en el recorrido y preguntales qué tienen en común y en qué se diferencian esos paisajes.

3. Para continuar, podés preguntarles a los chicos si les parece que los cambios que advirtieron ocurrieron lenta o rápidamente. A partir de sus repuestas, es posible conducirlos a la conclusión de que el paisaje cambia continuamente. En este momento, sería conveniente centrarse en los cambios “rápidos” e invitar a tus alumnos a imaginarse un paisaje que conozcan y pensar si cambia y cómo cambia, por ejemplo en los distintos momentos del día, a la noche, con la sucesión de la estaciones, luego de una tormenta, etcétera. A continuación, proponeles analizar esos cambios a partir una fotografía.

Pediles a tus alumnos que observen la siguiente fotografía y que la describan. Luego, invitalos a imaginarse esa misma fotografía de día y con sol, y que describan oralmente cómo se la imaginan.

Algunos trayectos posibles

1. Como los chicos ya tomaron contacto con el recorrido y analizaron algunas de las imágenes que allí aparecen, sugeriles navegarlo por completo, guiándolos para que presten atención a las imágenes que van encontrando y las comparen a partir de preguntas disparadoras, por ejemplo: las imágenes que ven ¿son parecidas? ¿Cuáles? ¿Por qué? ¿Qué tienen de similar, qué tienen de diferente? ¿Representan una parte o todo el parque? ¿Son actuales o modernas?

De este modo, es posible que los alumnos comiencen a discriminar las distintas representaciones de la realidad: planos, mapas y fotografías, y las analicen a partir del eje antes / ahora.

3. Para terminar esta parte de la actividad, contales a tus alumnos que este recorrido virtual se basa en un recorrido participativo que se realiza en el parque, y sugeriles que, con la ayuda del plano, lean las referencias y ubiquen los distintos elementos mencionados. Luego, con tu ayuda, pueden verbalizar el recorrido, por ejemplo: “El recorrido sale de…., después hay que caminar derecho hasta una bifurcación y tomar a la izquierda para llegar a….”.

Luego, te sugerimos que dividas a tus alumnos en parejas y entregues una impresión del plano con el recorrido a cada pareja. Por turnos, uno de los chicos inventará un recorrido por el parque y le dictará a su compañero las instrucciones para que lo marque en el plano. Luego, será el turno del otro miembro de la pareja.

Como los paisajistas

Como cierre de esta actividad, proponeles a tus alumnos imaginar y diseñar un parque ideal. Pediles que busquen imágenes de distintos parques y plazas en revistas, folletos turísticos, etcétera, y también en un buscador de imágenes de internet. Una vez que hayan observado las imágenes, divididos en grupos pueden comenzar a diseñar el parque y, finalmente, dibujar el plano del parque que imaginaron. Esta actividad es una buena oportunidad para que los chicos piensen, en el momento de dibujar el plano, qué elementos podrán representar y cuáles no.

Para organizar el trabajo, te proponemos las siguientes consignas.

  • Piensen qué forma les gustaría que tuviera el parque: regular o irregular.
  • ¿Tiene distintos sectores, por ejemplo juegos para chicos? ¿Cuáles?
  • ¿Tiene caminos? ¿Qué tipo árboles tiene? ¿Hay fuentes o lagos artificiales? ¿Dónde están ubicados?
  • Hagan el plano del parque. En una cartulina blanca, dibujen primero el contorno. Luego, piensen qué elementos de todos los que imaginaron se pueden representar en el plano y dibújenlos.
  • Una vez que hayan terminado de realizar el plano, se puede organizar una puesta en común con la exposición de cada grupo. Asimismo, esta actividad puede dar lugar a ejercitar otro género: el folleto turístico. Podés pedirles a tus alumnos que realicen un folleto desplegable.