Niño de la guerra del Paraguay.
Interpretar los modos de vivir los años de la niñez en épocas pasadas implica considerar que la infancia, tal como la pensamos, es fruto de un proceso que se inició con la modernidad, se aceleró a partir de fines del siglo XVIII y alcanzó su punto máximo durante la primera mitad del siglo XX. Pero los niños de verdad, los niños de la historia, vivían experiencias muy diferentes, tal como ocurre en la actualidad, aunque tendamos a confinar a la infancia a una suerte de experiencia unívoca e idealizada.
Existen aproximadamente una decena de retratos de niños de la época de la Guerra del Paraguay en la colección del MHN (en este caso, debajo de la imagen se lee “niño paraguayo después de la guerra”). Son imágenes muy duras aunque no menos que las que muestran a niños pakistaníes o iraníes, o a las milicias infantiles que existen en varios lugares del mundo. Contrastan con el resto de las imágenes de niños de clases acomodadas, vestidos a la más sofisticada moda europea del mismo período. En este caso, detrás del chico se puede observar el pie de madera que sostenía el cuello de la persona para asegurar su inmovilidad y de esta manera evitar que la fotografía –que requería un largo tiempo de exposición- saliese movida.